MITOLOGÍA GRIEGA:
Hera hija de Cronos y Rea, nació en la isla de Samos. Gracias a Zeus, fue liberada de las entrañas de su padre, que se la había tragado. vivió en la isla de Eubea.
Antes de conseguir que se casara con él, Zeus la cortejó bajo forma de cuco. Hera cogió el ave para arrullarla contra su pecho y ahí se dio cuenta de lo que tramó su hermano. Tiempo después, cuando nació Hefesto, Hera afirmó que su nacimiento se había producido sin intervención masculina.
Cuando se convirtió en la esposa de Zeus, y por ende en la soberana del Olimpo, de ella nacieron Ares, Ilitía y Hebe.
MITOLOGÍA ROMANA:
Juno era la reina de los dioses, y hermana del dios Júpiter. Era la protectora de las mujeres y se la veneraba bajo diversos nombres: como
Juno Pronuba presidía los casamientos, como Juno Lucina ayudaba a las mujeres en el parto, como Juno Regina, era la consejera y protectora especial del Estado Romano. Las fiestas en su honor, las matronalia, se celebraban el 1 de marzo. Juno es la equivalente latina de la reina griega de los dioses, Hera. El nombre del mes de junio proviene de la diosa Juno.

 

Hera demostró una fidelidad ejemplar a su esposo y persiguó a sus rivales con atroz ferocidad. Cansada de las incontables traiciones de Zeus, decidió vengarse de él al darle como hijo al horrible monstruo Tifón.
Los problemas de la pareja dieron lugar a múltiples discusiones, a las que los antiguos atribuían las perturbaciones atmosféricas. Era  modelo divinizado de la mujer esposa y madre, por lo que fue la diosa del matrimonio y de las mujeres casadas. Sus templos se erigieron en Argos, Olimpia, y Samos.